El Ministerio del Ambiente (MAE), tras el derrame de químicos contenidos en una piscina para el lavado de minerales (oro), en una empresa minera ubicada en Ponce Enríquez, provincia del Azuay, realiza el análisis de agua y especies, para determinar el grado de afectación y medidas de remediación. Los ríos Chico, Tenguel, Galas, afluentes y ramales de estos, en la provincia  del Guayas, tuvieron cierto grado de afectación.

Desde el miércoles pasado que se reportó el incidente, el personal del MAE trabaja en coordinación con funcionarios de la Secretaría Nacional del Agua (Senagua), Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, Juntas Parroquiales, entre otros, tanto en Azuay como en Guayas, para establecer las medidas de contención.

El avance de la mancha de químicos tornó el agua gris y provocó la muerte de especies como la tilapia, barbudo, cachuelas y dicas. Algunas fueron recogidas para el análisis, al igual que el agua.

La Autoridad Ambiental solicitó e insiste a los pobladores circundantes a los ríos, afluentes y ramales afectados, no usar el agua para sus sembríos u otras actividades, hasta que Senagua establezca los parámetros de calidad del agua óptima para el uso humano.

En Guayas, técnicos de la Reserva Ecológica Manglares Churute se encargan de monitorear en la zona, las condiciones del agua.